Reforma integral de vivienda unifamiliar de dos plantas, donde cada espacio ha sido rediseñado a medida según las necesidades del cliente. La planta baja se transforma completamente, integrando cocina y salón en un único ambiente abierto, y sumando un nuevo dormitorio, aseo y despacho. Se ha renovado toda la instalación eléctrica, fontanería, climatización y telecomunicaciones, además de actualizar la carpintería interior y exterior. La intervención se completa con falsos techos en toda la vivienda y una solería continua de porcelánico, que unifica y moderniza cada rincón con elegancia y funcionalidad.